Era la oportunidad perfecta para sumar de a tres. No sólo eso, sino que también saldar la gran deuda que tiene esta celeste de Jorge Sampaoli, que es la de convencer y ganar de local. Al frente estaba el último del campeonato nacional, Antofagasta, una escuadra que antes de su visita a Rancagua, sólo registraba tres empates. Sin embargo, lo de ayer en el Estadio El Teniente, sirvió exclusivamente, para alimentar las dudas de este equipo que sigue sin poder demostrar en casa, los excelentes resultados conseguidos en calidad de forastero.Antofagasta vino a hacer su negocio.
Los nortinos mostraron desde el minuto cero hasta el noventa y cuatro, un cerrojo, compuesto por una marcada línea de cuatro, que a veces se transformaba en seis, con la incorporación en la última zaga de los volantes centrales.
Esto se sabía. Ya en la semana los futbolistas celestes habían hablado que el partido se presentaría así. Con un equipo que vendría a meterse atrás. Por lo tanto, la clave del duelo de ayer, era buscar la formula de romper el férreo esquema defensivo. Las opciones existieron. Y muchas. Principalmente generadas, por el gran trabajo de Jean Beausejour, el constante abrelatas de la ofensiva rancagüina y que ayer demostró una vez más que es la gran figura de O’Higgins. “Estoy contento con el accionar del equipo. Nos generamos muchas opciones de gol. Fuimos superiores de principio a fin. Sin embargo, seguimos fallando en el finiquito de las jugadas”, manifestó Jorge Sampaoli.
El duelo al igual que los otros dos partidos en calidad de local, comenzó con un O’Higgins parado en el campo rival. Con una línea defensiva, integrada por Martorell, Cáceres y Olate, parada en la mitad de terreno local.El dominio celeste fue claro. Durante los primeros veinte minutos, la defensa local y el golero Carlos Tejas, fueron meros espectadores. Asistente privilegiados, que presenciaban como Beausejour, encaraba una y otra vez por la banda izquierda, creando las principales opciones de peligro, que fueron malamente desperdiciadas por los encargados de entrar por el centro del campo de juego.
EL DESPILFARRO CELESTEO’
Higgins no jugó mal. Eso hay que dejarlo claro. Sin embargo, el marcador es el que manda. A los 20 minutos comenzó el derroche que se extendió hasta el minuto 90. Opción que surgió en la banda derecha, donde se entendieron muy bien, Carlos Carmona, que cumplió en su primer duelo como titular, y Rodrigo Ramírez, que luchó un balón cediendo para Felipe Flores, que no alcanzó a llegar, ante la gran salida, de una de las figuras del encuentro, Carlos Ortega.A los 28 ocurrió la más clara de la primera mitad. Gran jugada que surgió en la banda derecha, entre los mismos protagonistas anteriores. El mundialista sub 20 que cede para Brian Danesi que mete un pase milimétrico a las espaldas de la defensa para Beausejour que en una inmejorable posición, con todo el arco a su disposición prefirió ceder con un vistoso “taco” para Felipe Flores, que no llegó al balón.Acto seguido surgió la primera de Antofagast y no fue sino en una pelota parada, que bien pudo haber significado la apertura del marcador. Impecable tiro libre, enviado desde unos cuarenta metros, por el defensor central Vladimir Guerrero, que encontró una sólida respuesta del meta rancagüino. De ahí en más el trámite siguió teniendo un claro dominador. Con un O’Higgins dueño del balón, pero que seguí fallando en el finiquito.
La segunda mitad comenzó con todo. Y es que al parecer el café del entretiempo estuvo bien cargado, pues al primer minuto de juego, “Palmatoria” arrancó por la banda izquierda, se saca a dos hombres, entra al área y cede al centro medido para la arremetida de Rodrigo Ramírez, que no alcanza a llegar al balón. No pasó ni un minuto, cuando nuevamente Beausejour se hace un picnic con la zaga nortina, cede para Danesi que se demoró medio siglo en definir, propiciando un oportuno achique de Carlos Ortega, que controló la esférica de gran forma.La presión era constante, dando la impresión de que el gol caería en cualquier momento. A los cuatro minutos, la redonda cruza de costado, la controla Flores que centra, cabezazo de Cáceres y Nicolás Diez que no alcanza a puntearla.Al minuto siguiente gran pelotazo de Beausejour, la figura celeste, para Carmona que envía un pase calculado para la aparición de Rodrigo Ramírez, que lamentablemente cabeceó a las manos del meta visitante. A los siete surgió la más clara del encuentro. Brillante pared entre Felipe Flores y Beausejour, que encara entre la defensa rival, y cuando el balón parecia por perdido mete un pase brillante para el ex hombre de Coquimbo, que solo frente al arco, patea fuera.
Milagro en el arco nortino y que sólo viene a ratificar que el ariete, está peleado con el arco. Sensación que quedo más que de manifiesto a los doce, cuando tras un pelotazo de más de 50 metros de Roberto Cáceres, Felipe Flores recepciona y ante la salida del meta, define por dos metros fuera del arco.Las opciones siguieron, el despilfarro también. Primero Danesi, que no alcanza a meter la punta de su pie, y luego Hans Gómez, que a un metro del arco, remata hasta la posición de Ortega, que ya estaba en el piso, presenciando como el balón debía entrar al arco. Aunque este se fue derechito a las manos del golero. Sampaoli busco variantes, hizo ingresar al nombrado Gomes a Sebastián Varas y a Johan Henríquez, que nada pudieron hacer por cambiar el resultado que ya estaba escrito.O’Higgins sumó un punto, llegando a doce unidades. Sin embargo como reconoció el “Bielsa del Cachapoal” y los propios jugadores, son dos puntos perdidos y no uno ganado. “Sabíamos que sería un encuentro duro. Pero no pensábamos que O’Higgins nos pasaría por arriba, como lo hizo. Tuvieron la pelota gran parte del encuentro. Nos metieron atrás y por suerte pudimos sumar un punto” dijo el técnico visitante Mario Vener.El próximo duelo de la escuadra rancagüina, será el miércoles a las 20 horas en San Carlos de Apoquindo, donde los dirigidos de Jorge Sampaoli deberán comprobar ante Universidad Católica si es o no verdad, que el esquema del rosarino funciona mejor en calidad de forastero.
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